lunas: Titán tiene un sistema de agua diverso
Titán, la luna de Saturno, es sin duda uno de los cuerpos celestes más exóticos de nuestro sistema solar. Sus aguas, sin embargo, recuerdan un poco a las de la Tierra.
Grandes ríos se dirigen hacia los océanos salados: pero no estamos hablando de la Tierra, sino de Titán, la luna de Saturno. Este cuerpo celeste también tiene numerosas masas de agua que, a pesar de las enormes diferencias, se parecen a nuestros ríos y mares, como muestran los datos evaluados recientemente por la misión Cassini. El astrónomo Valerio Poggiali de la Universidad de Cornell y su equipo informan en «Nature Communications» cómo cambia la composición de los grandes mares de Titán desde el Polo Norte hasta el ecuador de la Luna.
Estudios anteriores de las aguas se basaron principalmente en las ondas de radar que Cassini envió y recibió. Pero el grupo de trabajo de Poggiali también utilizó el radar reflejado desde Titán y recibido en la Tierra a través de antenas especiales de la Red del Espacio Profundo. El ángulo más plano de la señal reflejada aseguró que contuviera dos tipos de ondas polarizadas, de las cuales el equipo pudo extraer más información sobre la composición de los humedales.
Según los análisis, su contenido de etano aumenta al sur del Polo Norte: mientras que en el Polo Norte hay mares de metano casi puros, más al sur hay aguas mixtas. Los ríos también tienen niveles de metano más altos que los lagos y mares a los que desembocan. El etano tiende a desarrollarse o acumularse allí. Como resultado, se reduce el contenido de etano en los estuarios, al igual que la salinidad de los mares de la Tierra cuando los afluentes terminan allí.
Al contrario de estudios anteriores, también puede haber olas en las aguas. En sus evaluaciones, Poggiali y sus colegas descubrieron superficies rugosas en la zona de los ríos y sus desembocaduras, lo que indica olas provocadas por fuertes vientos y mareas. Algunas costas también sugieren que pueden haber sido creadas por la erosión inducida por las olas. Si esto se confirma, los científicos también podrían utilizar esta actividad para aprender más sobre el clima en el satélite, como por ejemplo qué tan fuertes deben ser las tormentas en Titán para levantar olas.
Comunicación de la naturaleza 10.1038/s41467–024–49837–2, 2024
Permita que Javascript mantenga la funcionalidad completa de Spektrum.de.