CalleDesde hace algún tiempo, la frecuencia de la diabetes tipo 1, también conocida como diabetes juvenil, ha aumentado en un cuatro por ciento, año tras año. La suposición es que los factores ambientales son la fuerza impulsora, porque los genes no pueden cambiar tan rápidamente. Pero qué factores promueven la enfermedad está lejos de saberse. Estas son las malas noticias. Pero también hay buenas noticias: en los últimos años se han producido importantes avances en el tratamiento y diagnóstico precoz de este tipo de diabetes.
Un gran avance es una nueva inmunoterapia que puede retrasar la aparición de la enfermedad en un promedio de dos a tres años. Su ingrediente activo se llama teplizumab. Calma el sistema inmunológico del paciente que ha perdido el ritmo. En la diabetes tipo 1, el sistema inmunológico del cuerpo ataca y destruye las células productoras de insulina en el páncreas llamadas células beta. Sin insulina, sin embargo, el cuerpo no puede utilizar el azúcar como sustancia energética. Por lo tanto, los pacientes con diabetes tipo 1 deben recibir la hormona vital artificialmente de por vida. Desde que los científicos conocen este mecanismo patológico, han estado buscando formas y medios durante años para evitar la desaparición de las células beta.