Lifestile

Descubrimientos sobre las huellas en el arte rupestre de la Edad de Piedra


Representaciones de animales concretos: los cazadores y recolectores de la Edad de Piedra en Namibia alguna vez representaron numerosas huellas de animales en las paredes rocosas. Los investigadores locales han proporcionado ahora a un equipo de investigación alemán información sobre los secretos de este arte rupestre. Pudieron demostrar que en las imágenes de seguimiento los humanos de aquella época transmitían información: además de la especie y la extremidad correspondiente, también se reflejan la edad, el sexo y la dirección de movimiento del animal representado. El estudio ilustra una vez más cómo la investigación puede beneficiarse del conocimiento indígena, afirman los científicos.

Las superficies de piedra alguna vez sirvieron como “lienzos”: en muchos lugares del mundo, los humanos prehistóricos dejaron fascinantes representaciones de sus creencias y vidas. A menudo se representaban figuras animales o humanas o siluetas de manos. Pero en algunos sitios también se conocen representaciones de huellas y huellas de animales. Se pueden encontrar ejemplos particularmente sorprendentes en las montañas Doro !nawas del noroeste central de Namibia. Hoy en día, esta zona está en gran parte reservada a los animales salvajes, pero no siempre fue así: el arte rupestre de muchos yacimientos muestra que allí vivieron cazadores y recolectores en la Edad de Piedra. En las superficies de piedra esculpieron representaciones humanas y animales: además de figuras de cuerpo entero, también se encuentran numerosas huellas y huellas de animales.

El conocimiento indígena fluye hacia la ciencia

Sin embargo, se ha prestado poca atención a las imágenes de huellas de animales. «En realidad, la gente ignoraba por completo que las rutas y los caminos también son un rico medio de información», afirma el coautor Andreas Pastoors, de la Universidad Friedrich-Alexander de Erlangen-Núremberg (FAU). Probablemente una razón es que los investigadores que llegaron no tenían un ojo experto para estos elementos. Pero Pastoors y sus colegas han compensado esta debilidad: los científicos han contado con el apoyo de los rastreadores namibios Tsamgao Ciqae, /Ui Kxunta y Thui Thao. El equipo de investigación germano-namibio instaló un campamento cerca de las pinturas rupestres en las montañas Doro !nawas, desde donde pudieron visitar y analizar fácilmente seis paredes rocosas.

Tal vez también te interese leer  Amapola de maíz y cómo mantenerla en forma como flor cortada

Las ilustraciones muestran diversos motivos, incluidas figuras de personas y animales como elefantes, jirafas, rinocerontes y avestruces. Estas representaciones también son relativamente fáciles de reconocer e interpretar para los arqueólogos occidentales. Pero no ocurre lo mismo con las numerosas imágenes de huellas de animales: “Desde el punto de vista de la historia del arte occidental, los investigadores no pueden ver nada en estas imágenes porque no tienen la experiencia necesaria para hacerlo. Por eso las huellas todavía no se consideran una fuente de información legible”, afirma Pastoors. Sin embargo, dada la gran representación de estos elementos, se puede suponer que eran muy importantes para la gente de entonces.

El ojo del conocedor aporta información interesante

Resulta que ahora los expertos locales lograron reconocer en las imágenes información interesante y detallada: en más del 90% de las 513 imágenes de huellas analizadas, no sólo identificaron la especie animal, sino también el rango de edad, el sexo, las extremidades exactas, la lado del cuerpo y el camino para caminar. Resultó evidente que en las zonas rocosas cercanas había más especies representadas por huellas de animales que por figuras. Las otras 20 especies incluían representantes de monos, antílopes y aves, informa el equipo.

Curiosamente, algunas de estas especies animales no se encuentran hoy en la región y requieren condiciones ambientales más húmedas que las que prevalecen, al menos hoy, en esta parte de Namibia. Entonces surge la pregunta de por qué fueron representados. Es posible que estos animales también se encontraran alguna vez en esta región. Pero en realidad se supone que las montañas Doro !nawas eran tan áridas entonces como lo son hoy. Sin embargo, es posible que hayan llegado a conocer a la gente a través de sus extensas incursiones. «Es muy posible que los artistas conocieran regiones con condiciones ambientales más húmedas», afirma Pastoors.

Tal vez también te interese leer  Procesamiento de los recuerdos traumáticos en el cerebro

Durante la investigación, el equipo también notó un patrón interesante en la dirección de viaje indicada. «Proyectamos un reloj virtual sobre la pared de la roca y luego anotamos la orientación de las vías en función del número de horas», explica Pastoors. Resultó que la mayoría de las pistas están alineadas verticalmente: la mayoría apuntan hacia las doce en punto y algunas también apuntan hacia las seis en punto. Pero el equipo descubrió que había una excepción interesante a esta regla: las huellas de cebra estaban representadas en las paredes rocosas y apuntaban en todas las direcciones posibles. Así que tal vez esto tuviera un significado especial.

“Este estudio fue realmente interesante porque en las huellas de los animales hay mucha más información de la esperada”, resume Pastoors. Por último, subraya también la importancia general del estudio: «Es una confirmación más de que el conocimiento indígena, con su profundo conocimiento de una serie de áreas temáticas, puede hacer avanzar significativamente la investigación arqueológica», afirma el científico.

Fuente: Universidad Friedrich Alexander Erlangen-Nuremberg, artículo especializado: PLoS ONE, doi: 10.1371/journal.pone.0289560


Related posts

Energía eólica: el cambio climático está elevando los precios de los cereales

Nuestras Noticias

¿El alcohol con moderación es dañino o saludable?

Nuestras Noticias

Lo que sabemos sobre Omicron

Nuestras Noticias