Neo Orbi
Roberto Klatt
- Que Barco eléctrico Neo Orbis voluntad con uno compuesto de hidrógeno sólido operado
- Para hacer esto, suba a bordo Borohidruro de sodio (NaBH4) Hidrógeno liberado de una pila de combustible entonces genera electricidad
- Esto simplifica el Almacenamiento de combustible significativamente en comparación con el gas hidrógeno
El barco eléctrico holandés Neo Orbis es el primer barco del mundo operado con una conexión fija de hidrógeno.
Ámsterdam, Holanda). El buque eléctrico Neo Orbis (PDF) está en construcción en los Países Bajos como parte del proyecto europeo H2Ships. El pequeño barco de pasajeros tiene unos 20 metros de largo y está diseñado como un barco turístico para transportar turistas a través de los canales de Ámsterdam y en la zona portuaria entre Ámsterdam e Ijmuiden. Un sistema de pila de combustible proporciona la energía para el accionamiento eléctrico del Neo Orbis. También hay dos baterías a bordo, cada una con una capacidad de 25 kilovatios hora.
El hidrógeno para la pila de combustible se almacena en el Neo Orbis como un compuesto sólido y no en forma gaseosa en un tanque a presión como suele ser el caso. El Neo Orbis es el primer barco en utilizar hidrógeno como combustible sólido.
Hidrógeno como borohidruro de sodio (NaBH4)
El hidrógeno se almacena a bordo como borohidruro de sodio (NaBH4). Para que la celda de combustible funcione, se debe liberar hidrógeno. Para ello, se añaden agua ultrapura y un estabilizador al borohidruro de sodio en polvo. El borohidruro de sodio disuelto luego reacciona con un catalizador y libera el hidrógeno unido.
El calor liberado durante este proceso químico se utiliza para calentar el barco. En una etapa posterior de desarrollo, también se instalará un acumulador de calor, que ahorrará el calor no utilizado para su uso posterior. El agua producida por la pila de combustible se utiliza en el Neo Orbis para la liberación de hidrógeno.
Posible reciclaje de combustible
Al final del proceso, lo que queda del borohidruro de sodio es metaborato de sodio (NaBO2). Al reaccionar con el hidrógeno, el metaborato de sodio se puede reciclar en nuevo combustible. Para hacer esto, sin embargo, debe trabajarse en el suelo.
Según los líderes del proyecto, el borohidruro de sodio como combustible tiene claras ventajas sobre el gas de hidrógeno. No necesita ser refrigerado o presurizado para su almacenamiento. El punto de ignición también es significativamente más alto, lo que aumenta la seguridad del sistema.
El Neo Orbis fue construido por el astillero holandés Next Generation Shipyards. Las primeras pruebas de manejo están programadas para el verano de 2023.