Las sales de litio se han utilizado durante mucho tiempo en psiquiatría para estabilizar el estado de ánimo. Pequeñas dosis de metal ligero, por ejemplo, protegen a los pacientes con trastorno bipolar y depresión de caer en fases melancólicas o maníacas. Científicos británicos han descubierto ahora otra propiedad positiva de la sustancia: parece que tomarla regularmente se asocia con un menor riesgo de desarrollar demencia.
Un equipo de psiquiatras dirigido por Shanquan Chen de la Universidad de Cambridge compiló unos 29.000 registros médicos y los analizó en relación con la demencia, entre otras cosas. 550 de los pacientes habían recibido litio por trastornos mentales. De media, estas personas tenían un menor riesgo de demencia que el resto de los pacientes estudiados, especialmente tras un uso prolongado de al menos cinco años.
Esto fue cierto tanto para la enfermedad de Alzheimer como para la demencia vascular. Según los investigadores, el hallazgo es aún más sorprendente dado que tres cuartas partes de los pacientes en el grupo de litio habían sufrido de manía o trastorno bipolar. Según estudios previos, estas enfermedades aumentan significativamente el riesgo de desarrollar demencia. Es posible que tomar litio no solo haya neutralizado el mayor riesgo, sino que también lo haya revertido.
Según los científicos, ahora es importante averiguar si el litio también podría usarse como una opción de tratamiento en caso de demencia ya diagnosticada o en su etapa preliminar, deterioro cognitivo leve. Los estudios correspondientes ya están en marcha.